Hace unas semanas se llevó a cabo una reunión entre el empresariado privado y el Gobierno Nacional, encabezado por el Presidente Luis Arce. Esta reunión buscó generar propuestas y soluciones para la situación actual que atravesamos como país.
Como resultado de este encuentro, se generaron 17 puntos, entre los cuales, para sorpresa de todos, se propone conformar el GABINETE DE TURISMO entre el sector privado y el Gobierno Nacional para impulsar el desarrollo del sector a nivel nacional. Esto, claramente, es solo un cumplimiento de la Ley 292 “Bolivia te espera”, que establece la creación de un Consejo de Coordinación como una instancia consultiva de proposición y concertación entre los diferentes niveles del Estado; algo que hemos solicitado durante mucho tiempo.
Sin embargo, siendo parte del sector y conociendo que durante muchos años hemos sido completamente ignorados por los gobiernos de turno, la conformación de dicho Gabinete abre una oportunidad para proporcionar directrices para la formulación de la política nacional en materia de turismo. Además, permitirá ofrecer asesoramiento a nuestro ente matriz y a todas las reparticiones del Estado relacionadas con nuestra actividad en la evaluación de políticas, supervisar la aplicación de la legislación en la materia a través de recomendaciones y consenso, y trabajar en la construcción de una política turística más democrática, con un enfoque en la generación de ingresos y la reducción de desigualdades. También permitirá construir estrategias para el desarrollo del turismo interno, atraer turismo extranjero, promover la sostenibilidad ambiental, social y cultural, y mejorar la infraestructura de los servicios a nivel nacional.
Es igualmente necesaria la canalización de sinergias con otros sectores económicos del país, dado que el turismo, siendo un sector transversal a muchas actividades económicas, beneficia del movimiento económico generado por él.
En cuanto a la conformación del Gabinete, muchos actores opinan que este debe estar integrado por instituciones representativas y legalmente constituidas del sector privado, que serán las interlocutoras acreditadas. Por el sector público, debe contar con la participación de diversos Ministerios para lograr la coordinación y ejecución de las medidas propuestas por ambos sectores.
Tenemos la esperanza de que este sea un paso hacia el reconocimiento de la importancia y potencial del turismo como un sector estratégico en la economía, generador de divisas y con el potencial de cambiar la matriz económica del país. Es momento de construir de manera conjunta el presente y futuro de todos los bolivianos, dejando de lado intereses y colores políticos.